¿Que es un psicodiagnostico?

Es una evaluación psicológica que consta de la toma, administración e interpretación de una batería de test psicométricos y/o proyectivos en el lapso de algunas entrevistas. Para la toma, se pacta un encuentro y se establece el primer contacto en el que se dialoga y se ejecutan dichas pruebas. Se realiza una devolución en una última entrevista. Se administra en el consultorio del profesional.

Tests psicométricos: evalúan funciones cognitivas: memoria, atención, coeficiente intelectual, capacidad para realizar una tarea durante un determinado tiempo, etc. Test Guestáltico, Visomotor, Bender y Raven entre otros.

Tests proyectivos: evalúan aspectos subyacentes de la personalidad, capacidades, resolución de conflictos, trabajo en equipo, estados emocionales en general, etc. HTP, Test de Rorschach, Test Desiderativo, Persona bajo la lluvia, Test de los colores, Test de Zulliger, TRO y Dominó entre otros.

Con dichas pruebas, se permite acceder a la personalidad del sujeto de una manera relativamente rápida y sencilla. Los motivos para la solicitud de un psicodiagnóstico pueden ser diversos y de ello dependerá la elección de las técnicas a ejecutar, que será evaluado por el profesional.

En el Área Laboral: para selección de personal, evaluación de desempeño, etc.

En el Área Forense: como perito auxiliar del juez para determinar la imputabilidad o no de un hecho delictivo o de un siniestro.

En el Área Clínica: podría solicitarlo un profesional de la salud para emprender el tratamiento indicado de acuerdo al diagnóstico. Pueden ser solicitados desde las escuelas, por ejemplo para evaluar ciertas problemáticas pedagógicas, de conducta y orientación vocacional.

Para obtener el registro de conducir es necesario y obligatorio rendir un examen psicométrico que evalúa principalmente la función viso- motora (Test de Bender), entre otras.

¿En qué consiste?

El primer encuentro habitualmente es una entrevista semi dirigida en la que se intenta conocer a la persona y romper el hielo inicial. En la misma o en la siguiente reunión comienzan las pruebas, algunas son gráficas, como el HTP, otras son ejercicios en los que se registra el tiempo, como el Raven, otras son preguntas como en el Cuestionario Desiderativo.

Al finalizar las entrevistas se realiza la interpretación de los protocolos para una futura devolución. Este último encuentro se pacta con el entrevistado o con quien la haya solicitado, por ejemplo los padres de un niño.
En el caso de una evaluación laboral, no se efectúa directamente con el candidato, se tiene una entrevista con el empleador, sintetizando los aspectos relevantes para la búsqueda del perfil indicado.

Cuando se realiza la devolución, se transmiten las conclusiones a las que se ha llegado asegurándose de que se entienda completamente, aclarando las dudas, si las hubiera y se recomienda —en caso necesario— un tratamiento psicológico.